Las técnicas de Aikido no requieren potencial físico en cuanto a su realización por lo tanto toda persona que disponga de su integridad física puede beneficiarse de este arte marcial.
Sin embargo, para los niños, la edad límite inferior podría ser 6 años. Se practica en un clima divertido y dinámico y se integran todos los aspectos esenciales en el desarrollo y el aprendizaje, por medio de juegos, formas, posturas, movimientos, desplazamientos, técnicas de defensa personal y diversos ejercicios realizados a través de diferentes actividades lúdicas. De esta manera se logra que sientan curiosidad ante nuevas situaciones y se muestren dispuestos al cambio, logrando una formación y educación global en los distintos ámbitos.
Este arte marcial nos presenta benefícios físicos derivados del ejercicio aeróbico, beneficios sensitivos y motores derivados de la técnica, beneficios sociales derivados del entrenamiento conjunto entre iguales con semejantes inquietudes y profundos beneficios psicológicos derivados del camino de superación personal que realmente es el Aikido.
Practicando Aikido aprendemos valores como:
Humildad, disciplina, respeto, sensibilidad, constancia, perseverancia,
asertividad, templanza, valor.